Ahora que muchas empresas están reabriendo, es imperativo asegurarse de que el equipo de emergencia cumpla con las normas, esté en condiciones de trabajo seguras y en la ubicación correcta en relación con los peligros del lugar de trabajo

Si bien los lugares de trabajo dependen de la higiene y la seguridad ocupacional para su sustento y éxito, el brote de coronavirus ha subrayado esas necesidades básicas y críticas de una manera sin precedentes. Los lugares de trabajo deben tomar medidas para proteger a los trabajadores del coronavirus, pero es fundamental estar bien preparado para todos los peligros en el trabajo que puedan ocurrir.

Ahora que muchas empresas están reabriendo después de haber estado cerradas durante un período prolongado de tiempo, es imperativo garantizar que los equipos de seguridad de emergencia estén en condiciones de funcionamiento seguro y adecuado, libre de peligros microbianos y en la ubicación correcta en relación con los peligros del lugar de trabajo.

El cierre temporal o la reducción del funcionamiento de un empresa y las reducciones en el uso normal del agua pueden crear peligros para los ocupantes que regresan. El moho es un ejemplo de peligro microbiano que puede representar un riesgo para la salud después de un período de inactividad del edificio. Para el moho, un período prolongado puede ser de días, semanas o meses, según los factores específicos de la empresa y las variables climáticas. Por lo tanto, limpiar los sistemas y dispositivos de agua de la empresa es de vital importancia.

Además, muchos espacios de trabajo se han reconfigurado o se están reconfigurando para permitir al menos dos metros de distanciamiento social entre los trabajadores. Estos cambios pueden cambiar la ubicación requerida de duchas y lavaojos de emergencia en los lugares de trabajo. Tenga en cuenta que ANSI / ISEA Z358.1–2014 establece que los accesorios deben ubicarse dentro de los 10 segundos o 17 metros de un peligro potencial. También debe estar ubicado al mismo nivel que el peligro con un camino de circulación sin obstáculos.

Con base en estas nuevas variables ambientales, además de la norma ANSI / ISEA Z358.1 para pruebas semanales, se recomienda que las instalaciones realicen un recorrido minucioso del lugar de trabajo al reabrir.

 

 

A continuación, presentamos algunas formas proactivas de restaurar y optimizar las duchas y lavaojos de emergencia:

Inspeccionar, probar y enjuagar los lavaojos y las duchas. Las duchas de seguridad de emergencia y el equipo de lavado de ojos deben inspeccionarse, activarse, probarse y verificarse semanalmente para garantizar un uso inmediato, confiable y adecuado.

Cada semana, los jefes de seguridad deben verificar que el equipo de emergencia:

• Se coloque de acuerdo con el estándar ANSI / ISEA.
• Funcione correctamente sin piezas faltantes o rotas.
• Tenga líneas enjuagadas para limpiar los escombros y el agua estancada.
• Esté protegido contra la congelación.
• Use líquido tibio (38 grados Centígrados).

La activación semanal garantiza que nada bloquee el flujo del líquido de lavado y elimina cualquier posibilidad de contaminación por agua estancada. Es importante que todos los cabezales del dispositivo estén activados, incluido el lavaojos o el cabezal de lavado de ojos / cara, así como el cabezal de la ducha.

Tómese el tiempo para limpiar las líneas lo suficientemente largas como para limpiar la línea de sedimentos y escombros. Las unidades autónomas también deben inspeccionarse visualmente semanalmente. Las etiquetas de inspección a menudo se incluyen con accesorios para documentar las pruebas y cumplir con una auditoría de seguridad.

Evite la contaminación del equipo

A veces, el agua estancada sobrante de activaciones falsas, manipulaciones y otros usos indebidos por parte de los trabajadores, dejan el equipo vulnerable a la contaminación.

Capacite a los empleados

Si bien la capacitación en duchas de emergencia siempre es importante, hoy es aún más crucial, ya que algunos trabajadores pueden haber estado fuera del lugar de trabajo y podrían necesitar un repaso. Si bien las sesiones de capacitación pueden verse diferentes en estos días, con aprendizaje remoto y distanciamiento social, las instalaciones deben encontrar oportunidades para reforzar el protocolo de seguridad y el uso adecuado del equipo de seguridad de emergencia.