
Cuando hablamos del futuro del trabajo, los expertos dejan claro una cosa: el futuro es hoy. Y lo es más porque la pandemia del coronavirus ha acelerado muchas cosas, y buena parte de ellas en el entorno laboral. La covid-19 ha agregado buenas dosis de incertidumbre al mundo laboral, pero también algunas oportunidades.
Los lugares de trabajo han estado evolucionando rápidamente desde hace algún tiempo atrás y son varios conceptos que cambiaran el mundo laboral este año en específico. Los motivos son varios, pero el hilo central inició con un cambio de perspectiva generacional en cuanto al equilibrio de la vida laboral y personal, y que la digitalización nos ha dado más herramientas para que este equilibrio sea posible. A pesar de que ya se empezaba a notar este cambio y en algunas empresas comenzaban a implementar ciertos cambios en sus procesos y formas de interacción; para muchas otras esto aún era desconocido.
Tal vez fue un mal necesario, aunque nunca deseado, pero lo que sucedió en esta pandemia provocó que las empresas en todo el mundo y de todos los tamaños, tuvieran que dar dos pasos importantísimos:
- Generar nueva demanda de forma online
- Flexibilidad de horarios / Home office
Y en estas dos líneas es donde encontramos los conceptos que cambiaron en el mundo laboral:
#1 Del YO al NOSOTROS. Antes se buscaba al mejor, al más apto, cada individuo quería sobresalir de entre los demás. Ahora se busca al equipo que trabaje mejor en conjunto, la persona sobresale por cómo se desenvuelve con los demás, todos tienen un objetivo en común y todos ganan.
#2 De JEFES a LÍDERES. Antes los jefes debían ordenar que hacer y supervisar todo el tiempo para que las cosas se hicieran tal y como lo habían pedido. Ahora los líderes buscan la manera de dirigir y apoyar a sus colaboradores para que lo hagan de la mejor manera por ellos mismos. Buscan el desarrollo de todo su equipo y formar más líderes.
#3 De JERARQUÍA a REDARQUÍA. Antes las empresas se regían por un ascenso escalonado en el que se buscaba alcanzar lo más alto por encima de los demás. Ahora el objetivo es formar una red en donde todos y cada uno es igual de importante y todos están conectados para un buen funcionamiento, como un sólo sistema y el apoyo debe de ser mutuo.
#4 De CORTO plazo a LARGO plazo. Antes los directivos de las empresas enfocaban sus esfuerzos para ver resultados lo antes posible. Ahora se busca elaborar estrategias que pueden tardar más, pero los resultados son más confiables ya que están sustentadas por investigación y análisis de datos previos. Se apuesta por el emprendimiento en vez de buscar algo inmediato.
#5 Del enfoque de RESULTADOS al del CAMINO. Antes no importaba cómo, solo importaba obtener los resultados deseados. Ahora es tan importante analizar y documentar todo el proceso, como el resultado obtenido. De esta manera se tendrá una mejor perspectiva de las áreas de las fortalezas y áreas de oportunidad aprovechar los recursos al máximo.
#6 De la RUTINA a la CREATIVIDAD. Antes el éxito se basaba en encontrar una forma de hacer las cosas y estandarizarla para repetirla una y otra vez obteniendo los mismos resultados. Ahora lo importante es aportar nuevas ideas, hacer las cosas diferentes y estar en mejora continua; aunque eso signifique un riesgo, sólo así se impulsa el crecimiento.
#7 De la importancia de los PRODUCTOS a las PERSONAS. Antes lo más importante era obtener productos de mejor calidad cada vez sin importar cómo, las máquinas podrían sustituir a las personas en procesos automatizados para obtener el producto. Ahora lo más importante es encontrar talento para las empresas, personas que puedan implementar innovación y mejora constante. Ahora son más valoradas las habilidades que solo los seres humanos pueden tener y las máquinas o robots no, habilidades blandas.
#8 Del CONTROL a la CONFIANZA. Antes las empresas tenían una gran plantilla de jefes en cada área, y jefes de los jefes; todo con el objetivo de supervisar y controlar cada movimiento de los trabajadores. Cada movimiento, cada decisión debía ser autorizada antes. Ahora se tiene una mayor confianza para que los colaboradores tomen sus propias decisiones sin dudar que será para beneficio de la empresa y todos sus integrantes. Tienen mucho más autonomía y flexibilidad para cumplir sus labores con responsabilidad y compromiso. Pero esto solo se logra, con un minucioso proceso de contratación, formación y motivación.
#9 De ser REACTIVO a PROACTIVO. Como consecuencias del punto anterior, antes al haber un problema en la empresa, al no tener autonomía solían señalar a otros y buscar culpables. Se ponían en un papel de víctima. Ahora al tener mayor compromiso y estar más involucrados en las decisiones en vez de buscar culpables, buscan prontas soluciones entre todos. Actuar rápido y de la mejor manera.
#10 De la INCONSCIENCIA a la CONCIENCIA. Antes el movimiento era en automático, se creaban rutinas, procesos y se seguían sin detenernos a observar, analizar o cuestionar, casi sin notar lo que sucedía. Ahora se busca la consciencia plena, estar presente en el aquí y el ahora, concentrarse en lo que está sucediendo con todos nuestros sentidos para conocerlo mejor y saber exactamente lo que está sucediendo, sin distracciones. Esto genera mayor conocimiento y sabiduría para actuar de la mejor manera y disfrutar el momento.
#11 De la ESCASEZ a la ABUNDANCIA. Antes la atención se concentraba en lo que no tenemos, lo que nos hace falta para realizar alguna tarea o lograr algo y eso generaba un alto, una barrera. Ahora la atención debe estar en lo que sí tenemos, en cómo podemos sacarle mayor provecho, en cómo ocupar nuestros recursos de la mejor manera.
# 12 Del MATERIALISMO al HOLISMO. Antes el objetivo o el sentido de la vida para la mayoría era conseguir cosas, tener más, las cosas materiales definían el éxito de una persona. Ahora el sentido de la vida es estar en paz y en equilibrio con uno mismo y con los que nos rodean. Saber que nuestros pensamientos y acciones nos definen y nos las cosas que tenemos.
En plena crisis por coronavirus, estos nuevos conceptos se hicieron notar en un giro radical que dio la sociedad entera. Estamos ante un fuerte cambio y una nueva normalidad que llevará a la sociedad y al mundo laboral a otro nivel.
Depende de cada quien si nos sumamos a este gran cambio y aprovechamos todos los recursos que tengamos a nuestro alcance para crecer de manera personal y profesión