Dado que estar en casa hacía parte de nuestras rutinas de descanso, asociamos a la permanencia en el hogar conductas como permanecer en pijama durante gran parte del día, sin embargo, este es un hábito que debes mantener a raya.
¿Por qué nos perjudica quedarnos en pijama durante el trabajo en casa?
Quedarse en pijama no es algo negativo per se. Si en nuestra vida corriente un día no salimos a la calle y decidimos descansar por la casa en pijama, esto no tiene mayores consecuencias, al día siguiente retomamos la normalidad.
Sin embargo, el teletrabajo nos obliga a estar en casa, sin salir muy a menudo: todo lo contrario a la rutina a la que estamos acostumbrados que consiste en despertarnos, bañarnos, arreglarnos y salir a nuestras distintas actividades.
Quedarse en pijama durante varios días a la semana envía un mensaje negativo al cerebro: es como si le dijéramos que es hora de dormir o de no hacer nada, día tras día.
Por ello, es necesario que nos disciplinemos y seguir una serie de hábitos que ayuden a nuestra mente a diferenciar los momentos y actividades del día. Así, habrá un tiempo para trabajar o estudiar, comer, hacer actividad física, descansar y también un tiempo para cuidar de nuestro aspecto personal.
Dedicar tiempo a nuestra apariencia puede parecer algo totalmente secundario en estos momentos, pero hacerlo contribuirá a que nos sintamos mejor con nosotros mismos: por esta simple razón es muy importante.
¿Qué rutinas debemos mantener estos días para vernos mejor?
Las rutinas que decidamos seguir durante el trabajo en casa dependerán en gran medida de cómo sea nuestra jornada. En todo caso, todos deberíamos seguir estas pautas mínimas:
• Ducharse diariamente: el aseo diario activa nuestro metabolismo y mantiene nuestra piel limpia. Además, nos ayuda a despejarnos por la mañana y nos relaja si lo hacemos por la noche.
• Cambiarse de ropa: es importante utilizar la indumentaria adecuada para cada momento aunque permanezcamos en casa. De ese modo enviamos a nuestra mente un mensaje concreto: «ahora es momento de estar activos, de hacer deporte o de descansar».
• Peinarse y arreglarse: cada uno debe arreglarse y cuidarse en la medida en que se sienta bien, desde ensayar un nuevo peinado, arreglarse las uñas, hidratarse la piel o utilizar maquillaje. Un buen aspecto físico nos ayudará a mantener un buen estado de ánimo. ¡Cuidarnos está bien!
•Lavarse los dientes después de cada comida: además de ser un hábito imprescindible para nuestra salud física, la higiene dental nos transmite la sensación de que nos estamos cuidando y eso también tiene una repercusión positiva en nosotros.
Para mantener una buena autoestima, cada mañana báñate y arréglate. Ya tendrás tiempo de pasar el fin de semana en pijama, pero de lunes a viernes es mejor que establezcas esta rutina.